Hoy, como sacado de un cuento, amanecemos con el Santuario envuelto en niebla, que recibe a los peregrinos más madrugadores, son aquellos que asisten a la eucaristía de 7:30h. A continuación, acompañados de sus párrocos, en torno a las ocho, el sonido de unos cantos en honor a la Madre anuncian la llegada de la peregrinación que acogemos con el Rosario de Aurora, las comunidades de Baños de Molgas, Almoite, Presqueira, Guamil, Ambia y San Martín de Betán recibían en la bienvenida por parte del Rector del Santuario peregrinando para celebrar la eucaristía de 8:30h.
Hoy reflexionamos en la estela de la fe que nos ha dejado Santa María, rastreamos el profundo respeto de Dios para responder a su llamada; llamada que Dios hizo a la Virgen y que permanentemente hace a cada uno de nosotros. No puede existir una vida verdadera con Jesucristo si no somos capaces de responder con prontitud y generosidad de miras y de corazón al proyecto que Dios ha soñado para cada uno de nosotros. Es el recorrido de Santa María hacia Dios con apertura incondicional, y que no reservándose nada en su corazón, lo confía todo en Dios. Dios sigue llamando hoy como ayer a darlo todo en este mundo y en esta historia. El mundo y la Iglesia necesitan de nuevos sacerdotes y consagrados que digan Sí a Dios dando la vida al estilo de María.
Son muchos los peregrinos que acuden a honrar a María durante todo el día siendo la Eucarístia más mayoritaria la presidida por el predicador oficial este año, M.I. Sr. D. Luis Javier González Seguín a las 19 h.
Esta noche, a partir de las 22h. en medio de un ambiente de oración, devoción, silencio y recogimiento tuvo lugar un Acto Eucarístico con una oración vocacional ante el Santísimo y una procesión por el exterior de la explanada entre cantos y el sonar de las campanas.
Pidamos hoy, como intención especial por los sacerdotes y las vocaciones sacerdotales que dicen sí con la entrega de su vida, que ellos sean una transparencia de Jesucristo sacerdote.
Pasó una mañana, pasó una tarde el día segundo.